Buenas de nuevo compañeros, en esta ocasión tal y como nombra el título voy a hablar de un tipo de sesión muy atractivas al menos para mí.
Me refiero a las sesiones totalmente nocturnas, tal y como es muy normal el decir cuando hay poco tiempo para dedicar a nuestra afición lo que solemos hacer es ir a “echar el día”, pues bien pensando en esto pensé que solo dispongo de libertad horaria en algunas ocasiones desde las 19:00 hasta las 8:00 del día siguiente, esto junto con una gran afición te lleva a la frase… me voy a “echar las noche”.
Sesiones en las que al llegar esta anocheciendo y al amanecer debes estar recogiendo, son sesiones en las que todos tus sentidos están puestos en la pesca y nada más te distrae sesiones en las que disfrutamos las horas prohibidas que tanto nos gustan a nosotros y a nuestras amigos los peces.
Dicho esto paso a narrar un poco lo que fue mi última sesión nocturna, como bien digo rondando las 19:00 me dispongo a sondear la zona apurando al máximo los últimos rayos de luz que me brindaba el sol, hasta el punto de necesitar mi luz frontal para regresar al puesto, una vez colocadas las líneas en lo que supuse serian buenos hot-spot no pasaron muchos minutos cuando comenzaron a sonar tímidamente mi alarmas una picada extraña q no dude en tirar, para mi sorpresa fue un nuevo amigo que hizo que pasara unos minutos interesantes ya que era algo nuevo para mí, un chanel que superaba los 4kg de peso.
La noche preciosa y el oído que parece desarrollarse con la falta de visión podía escuchar los numerosos saltos de los peces y el corretear y nadar de alguna nutria, lastima de esta última no tener alguna foto ya que fue algo rápido en inesperado pero precioso. Comenzaron de nuevo los pitidos en mis alarmas una preciosa carpa que tímidamente supero los 7,5kg de peso.
Unos minutos más tarde, volví a conseguir una nueva captura con un poquito más de peso.
La sesión no se estaba dando nada mal y los puntos en los que pensé serian buenos para dar con las amigas estaban respondiendo bien, la actividad ceso durante unas horas, cosa que me vino bien para la lucha q a continuación me esperaba, ya que como loca se volvió una de mis alarmas anunciándome una nueva amiga que avía sucumbido los encantos de mis hook-baits, en este caso una locomotora de rio q marco poco más de 11kg en la báscula, para mí una de las capturas más bonitas que me ha brindado el rio por su genética y señales de estar bien alimentada.
Espero os haya gustado, y que como yo os animes a “ECHAR NOCHES” esas horas tan especiales que nos hace parecer agentes secretos.
